Es el momento de dejar de servir todos los vinos en una misma copa. Sabemos que tener disponible en tu restaurante toda una vajilla llena de filas de copas y copas diferentes puede resultar a veces complicado. Por eso desde Mosela te traemos las 3 copas definitivas con las que podrás combinar cualquiera de los vinos que tienes en tu bodega.

Antes de empezar debes saber que una buena copa de vino tiene que ser de cristal liso, transparente e incoloro y extremadamente fina. Sabido esto, conozcamos las 3 copas que necesitas en tu restaurante:

1- Copa Borgoña: la copa perfecta para los vinos Riojas y Riberas. Grande, cuello ancho, cáliz voluminoso y algo barrigudo, así es la copa de los vinos tintos. Su forma permite que los aromas suban con una mayor fuerza y evita que estos se pierdan en el fondo. Vinos como el Rioja Arienzo de Marqués de Riscal o el Ribera de Duero Flores de Callejo casan perfectamente con este tipo de copa.

2- Copa de vino blanco: este tipo de copa tiene en la forma varias similitudes con la copa burdeos pero con un tallo más prolongado y algo más pequeño en el cuerpo. Su tamaño algo menor permite que no se produzca una oxigenación excesiva del vino y ayuda a que el vino se mantenga a baja temperatura. Servir vinos como el Rueda Viña Calera, el albariño Condes de Albarei o incluso el rosado Inurrieta Mediodía en esta copa es una experiencia que sorprenderá a tus clientes.

3- Flauta: La típica de cava o champan. Su cuerpo alargado y estilizado hacen de chimenea para que el gas pueda tener una salida correcta. Estos vinos se deben servir bien fríos, de ahí que su cristal a menudo tiene un mayor grosor. Para este tipo de copas son perfectos el cava Petit Albet y Efect Brut Rosat

Sin duda, estos 3 tipos de copa harán que tus clientes disfruten y experimente cada sorbo de vino de una forma espectacular. Una vez conocidas las copas puedes entrar en nuestro catálogo y descubrir la variedad de bodegas que tenemos a tu disposición. Ponte en contacto con nosotros sin ningún tipo de compromiso.